En Tijuana, las fuerzas de seguridad mexicanas han desarticulado una presunta red de narcotráfico. La acción, resultado de una denuncia anónima recibida por la Policía Federal Ministerial (PFM), condujo a la detención de cuatro individuos identificados como Flora “H”, Kimberly “V”, Irene “J” y José “A”. Éstos sujetos enfrentan cargos por la posesión de dos toneladas, 547 kilos y 609 gramos de marihuana, así como la incautación de cinco cartuchos útiles.
La intervención policial se llevó a cabo después de que la denuncia anónima señalará actividades sospechosas en una residencia específica del fraccionamiento mencionado. Con la autorización del Ministerio Público Federal (MPF), la Agencia de Investigación Criminal (AIC) ejecutó la diligencia que culminó con la detención de los presuntos narcotraficantes y el aseguramiento del significativo cargamento de marihuana.
La droga, dividida en 245 paquetes y cinco cajas de cartón, fue descubierta junto con cinco cartuchos útiles, sugiriendo posibles conexiones con actividades ilícitas más allá del tráfico de drogas.
Tras la detención, el MPF solicitó una audiencia ante el Juez de Control, quien validó la legalidad del arresto y dictó la vinculación a proceso de los acusados. Los delitos imputados incluyen violaciones a la salud pública y la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos. En este contexto, el juez determinó la imposición de prisión preventiva oficiosa y estableció un plazo de tres meses para la conclusión de la investigación.
Protocolo contra marihuana
En el marco de las leyes mexicanas vigentes sobre drogas, es imperativo recordar que la posesión máxima permitida para uso personal e inmediato es de cinco gramos. Cualquier cantidad que exceda este límite puede acarrear penas que oscilan entre diez meses y 25 años de prisión, dependiendo de la cantidad y de la presunta intención de comercialización.
La legislación en torno al cannabis en México está experimentando cambios, pues en marzo de 2021, la Cámara de Diputados aprobó en lo general el dictamen para la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, con el propósito de despenalizar el uso lúdico de la marihuana. Sin embargo, la implementación completa de esta ley está pendiente de la aprobación correspondiente por parte del Senado.
En la actualidad, el Senado se encuentra en el proceso de dictaminación de diversas propuestas relacionadas con la regulación del cannabis. Aunque existe consenso en la necesidad de pasar de una regulación prohibicionista a una que aborde los derechos humanos, la salud pública, el desarrollo sostenible y la paz y seguridad, el uso recreativo y lúdico de la marihuana sigue siendo ilegal en México.
La posible legalización del cannabis plantea interrogantes sobre el control territorial y la seguridad de los productores locales. La regulación deberá garantizar la salvaguarda de la producción local, evitando su subordinación a grandes capitales nacionales o extranjeros que busquen monopolizar la comercialización de esta sustancia.
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