Alejandro Sanz no está pasando por su mejor momento. Todo comenzó con un alarmante mensaje compartido en sus redes sociales en el que aseguraba que “a veces no quiero ni estar”. Días después, se conocían dos de las posibles causas que podrían haberle llevado a hacer tal afirmación: su ruptura con Rachel Valdés, quien era su pareja desde hacía tres años, y la traición de un amigo por la que estaría en un momento económico muy complicado.
Pero no es lo único. Tal y como se acaba de conocer, Alejandro ha sido condenado por el juzgado de primera instancia número 47 de Madrid a hacer frente a un impago de casi 3 millones de euros relativo a la compra de unas propiedades de lujo en Miami y, además, se ha ejecutado un embargo sobre algunas de sus propiedades que el artista habría utilizado como aval. Según ha publicado LOC, el acreedor habría solicitado el embargo de sus marcas registradas y la incautación de su finca de Cáceres y un inmueble que posee en Cádiz.
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Para hacer frente a su grave momento económico, Sanz habría optado por deshacerse de la joya de su parque inmobiliario y es que justamente acaba de poner a la venta esta propiedad, ubicada en Jarandilla de la Vera, por la misma cantidad que se le requiere: tres millones de euros.
Conocida como El sueño de los parrales, en esta finca el artista ha pasado algunos de los mejores momentos de su vida. No solo fue el escenario de su boda con Raquel Perera, también donde en muchas ocasiones se ha ocultado del mundo, disfrutando de la naturaleza y de sus más allegados lejos del foco público. Ahora le toca despedirse de ella -o intentarlo- para salvar su maltrecha economía.
El cantante se hizo con ella entre los años 2001 y 2007 comprando y uniendo varios secaderos de tabaco hasta formar la propiedad que es hoy día y que, según Vanitatis, cuenta con una casa principal de casi 400 metros dividida en tres alturas, una vivienda auxiliar de 267 metros, un amplio jardín con cenador y piscina de verano. Además tiene una gran parte de cultivo dedicada a los cítricos y frutales, un hueco ecológico y olivos, pues cabe recordar que durante una época Sanz vendió sus productos bajo la marca Sombra por Alejandro Sanz.
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En poco más de cuatro años Alejandro Sanz ha vendido todas las propiedades que tenía, tanto en Estados Unidos como en España. La venta más conocida fue la de su mansión de Miami, que estaba ubicada en el 2050 de North Bay Road. La adquirió en el año 2001 por unos 4 millones de dólares y, en 2020, la intentó vender por 18. Sin embargo, tuvo que rebajarla en tres ocasiones hasta llegar a los 10 millones por los que finalmente quitaba el cartel de ‘se vende’ en marzo de 2021.
Pero estas no han sido las únicas transacciones que ha realizado. Tal y como se ha publicado, Alejandro Sanz llegó a ser dueño de una casa unifamiliar en el barrio de Conde de Orgaz que tenía 360 metros útiles y 260 de terreno, también una vivienda de veraneo en Tarifa, varios pisos en las localidades madrileñas de Vicálvaro y Hortaleza, una casa en La Finca -que vendió al futbolista Hazard- y cuatro solares en un pueblo del noroeste de la Comunida de Madrid. A día de hoy a su nombre, o al de sus empresas, solo destaacan la finca de Cáceres y un piso en Cádiz.
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