El teniente general Jorge Angulo, destituido por el Gobierno como jefe de la Policía Nacional (PNP), se ha dispuesto a colaborar con el Ministerio Público en la investigación sobre las interferencias del ministro del Interior, Víctor Torres, en el proceso de ascensos de grado, pases al retiro y designación de cargos de la institución que dirigió.
“Tengo pruebas de la interferencia […] en las decisiones del comando policial. Es un conjunto de evidencias como documentos, audios y conversaciones por el chat [de WhatsApp], que serán entregados en su momento al fiscal”, dijo en una entrevista difundida este martes por La República.
“Las pruebas están relacionadas con un grupo de generales, coroneles y comandantes, que iban a pasar retiro en diciembre del año pasado. Pero el ministro Víctor Torres se opuso a que se les diera de baja. Esto motivó tener que ir a Palacio de Gobierno para explicarle en persona a la presidenta Dina Boluarte la decisión de comando”, añadió.
Aunque Torres desestimó la acusación más temprano y cerró paso a las voces políticas que piden su renuncia, Angulo aseguró que sus prueban evidencian la injerencia política. “Yo no se lo he permitido porque transgrede los lineamientos de la directiva del proceso de cambios. Pero el trasfondo de todo, es que hay interés oscuro que con el tiempo se van a dar a conocer y que estuvieron detrás mi salida de la comandancia de la PNP”, dijo.
El exjefe policial precisó que el general Enrique Blanco, asesor del ministro, y el jefe de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior (Digimin), Sergio Monar, eran los encargados de cursar los pedidos de Torres. Por intermedio de ambos personajes, comunicaba disposiciones para interferir en las decisiones del Comando de la Policía Nacional.
Angulo ha sido citado por el Área de Enriquecimiento Ilícito y Denuncias Constitucionales de la Fiscalía de la Nación para el próximo viernes. En diálogo con el diario, adelantó que señalará a Blanco y Monar.
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