“Desde el primero de septiembre ninguna economía regional en Argentina va a pagar retenciones”, dijo el ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, el lunes pasado en La Rural.
“La mejor forma de que el sector deje de sentir presión, restricción o carga del resto de la economía, no está solamente apalancada en la idea de ver cómo vamos tomando en la coyuntura pequeñas o grandes medidas que después tienen que volver para atrás, muchas veces por la propia restricción que tiene la macro. El desafío es cómo a este motor principal lo acompañamos con otros motores”, aseguró.
“Escuché que a lo largo de la mañana se habló sobre las retenciones a las economías regionales. Quiero decirlo con toda claridad: no son 200 las economías regionales que tienen retenciones. Hasta el 30 de agosto son 6 y desde el primero de septiembre ninguna economía regional en Argentina va a pagar retenciones”, dijo.
Mañana Massa viajará a Mendoza y San Luis. En la primera provincia se reunirá con integrantes de la industria del vino en un encuentro en el que seguramente hablará de la quita que anunció la semana pasada. El ministro viajará junto a su par y jefe de campaña Wado de Pedro y además visitará la empresa Impsa, se reunirá con otros empresarios y referentes políticos y mantendrá un encuentro con jubilados mendocinos.
Alivio para el sector
La industria vitivinícola es un sector muy golpeado por la sequía que días atrás había alertado por el los malos números de la primera parte del años: en el primer semestre de 2023, las exportaciones cayeron un 26,8% en vinos fraccionados y un 44,5% en vinos a granel, representando una disminución del 31,7% en el volumen total de vinos enviados fuera del país. En términos de facturación, estas cifras suponen una disminución del 20% para los vinos fraccionados, del 32,3% para los vinos a granel y del 21% para el total de las exportaciones de vinos, según cifras de las empresas asociadas a Bodegas de Argentina, asociación que definió la situación como “crítica” a través de un comunicado.
“Nos resulta muy difícil desarrollar un mercado. Requiere de años de inversión sostenida. Más difícil nos resulta sostenerlos en las condiciones descriptas. Las bodegas argentinas han realizado grandes esfuerzos para no perder lo construido, pero llevan mucho tiempo exportando en condiciones que claramente les son desfavorables”, concluyeron.
“Massa dijo la semana pasada que no habrá más retenciones para las cinco cadenas principales de las economías regionales: tabaco, vino, arroz, algo de cítricos y el sector forestal. Con respecto al vino, la retención es del 4,5% y tiene un costo fiscal de USD 40 millones al año. Mendoza produce el 70% del total del país y allí hay 16.000 productores que generan 80.000 puestos de trabajo y exportan por USD 950 millones. Es un sector con muchas empresas chicos, el 55% tiene menos de cinco hectáreas. La idea es que esta quita haga que ese monto quede en el sector y, sobre todo, que llegue a estas empresas más chicas”, le dijo Juan José Bahillo, secretario de Agricultura, a Infobae.
“El contexto del sector no es el mejor. Vienen de dos años de caída en la producción y fueron castigados por heladas tardías y granizo. El año pasado heló en la primera semana de noviembre, algo que hizo mermar mucho la producción. Además, los precios internacionales no fueron los mejores. Vienen de dos años complicados en términos productivos”, destacó Bahillo.
Otro reclamo del negocio del vino es la firma de tratados de libre comercio (TLC) con algunos de los destinos más importantes de exportación, siguiendo el camino de Chile, país que abre mercados de esa manera a nivel global. “Estamos dispuestos a analizarlos y es lógico el reclamo que hacen, pero es una decisión política que hay que trabajar con Cancillería”, afirmó el secretario.
También se hablará de una posible inclusión de las bodegas más chicas del rubro, el 85%, para que accedan al nuevo dólar agro de 340 pesos. Es que para poder conseguir el nuevo tipo de cambio exportador las empresas tienen que ser parte del programa Precios Justos, y a muchas pymes no les conviene. De las 450 bodegas que venden en el exterior, sólo 20, que son las más grandes, tienen más del 80% del mercado interno. Sería un costo fiscal bajo ya que exportan muy poco comparado con las más grandes, pero aún no hay nada definido al respecto.
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