El martes pasado, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció que se harán recortes en los subsidios de colectivos y se subirá el precio del boleto mínimo en todo el país. Más adelante, se conoció que los cambios entrarían en vigencia el 1° de enero, pero mientras tanto las empresas siguen funcionando con el mismo precio de agosto y con una deuda de parte del Estado que ronda los $20.000 millones.
En este escenario, las empresas del AMBA comenzaron a restringir la salida de algunos colectivos para reducir los costos e intentar sostener los márgenes de rentabilidad. Así lo informaron a través de un comunicado emitido en forma conjunta por cinco entidades.
“Las cámaras empresarias que agrupan a las líneas de transporte público de pasajeros del AMBA ponen en conocimiento de las autoridades y de la población, que ante el brusco aumento del combustible, la devaluación que impacta de manera directa en la mayoría de los insumos y repuestos y la escasez de recursos con los que cuenta el sector, producto de un cálculo de costos realizado con precios del mes de septiembre del corriente año y además subvaluado en su origen con los principales parámetros de cálculo subestimados, las empresas operadoras se encuentran realizando restricciones de servicios de diferente magnitud según las posibilidades de cada una, de manera de evitar una paralización total y abrupta por falta de recursos”, comunicaron.
“Por su parte, la falta de acreditación hasta el momento de las compensaciones tarifarias correspondientes al saldo del mes de noviembre pasado, genera una incertidumbre adicional con relación al pago del aguinaldo que debería realizarse el próximo lunes 18 de diciembre”, alertaron.
El escrito fue firmado por la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta), la Cámara del Transporte de la Provincia de Buenos Aires (Ctpba), la Cámara Empresaria de Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (Cetuba) y la Cámara de Empresarios Unidos del Transporte Urbano de Pasajeros de Bs.As. (Ceutupba).
La mirada de las empresas
Luciano Fusaro, gerente de Aaeta, defendió la decisión de las empresas y recordó que el gasoil aumentó 37% esta semana. “Sólo ese ítem representa el 20% de nuestro costo y nuestros ingresos están congelados desde agosto. Además, la suba del dólar del 100% se trasladó a los costos”, justificó.
“No es una medida planificada. Se cortó el dinero y las empresas van a empezar a hacer lo que puedan. Hay una reducción del 10% en kilómetros. En vez de sacar a trabajar con 10 coches, sacan 9. Por eso las esperas son un poco más largas”, explicó Fusaro.
El vocero de Aaeta aseguró que se intenta hacer los recortes en los horarios que no son pico, para dañar lo menos posible a los usuarios.
También el titular de la Cámara Empresaria del Transporte Urbano de Buenos Aires (Cetuba), Mario Vacca, se refirió a las restricciones en las salidas de colectivos. “La situación es muy variable entre una empresa y otra; cada cual está haciendo lo que puede. No hay una medida conjunta”, señaló.
Vacca, indicó que, a los problemas mencionados por Fusaro, se suma otro muy importante: la deuda que el Estado mantiene con las empresas por la transferencia de subsidios. “Esta semana debían ingresar casi $20 mil millones, pero la verdad es que no entró el dinero y no hay perspectivas de que vayan a depositarlo mañana”, lamentó.
“Esto complica aún más las cosas. Por eso es que algunas empresas ya empezaron a restringir sus servicios, es porque no les dan los números”, agregó el representante de las empresas de transporte.
Fusaro y Vacca coincidieron además en que, de no ingresar el dinero adeudado por parte del Estado, algunas empresas podrían tener problemas para enfrentar el pago del aguinaldo el próximo lunes. “Ló último que queremos son medidas gremiales”, enfatizó el titular de Cetuba.
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